SANTO DOMINGO (EFE).- Al gobierno haitiano le toca hacer su tarea y dejar de tomar a la República Dominicana como pretexto para “evadir sus responsabilidades” frente a su pueblo, afirmó el Ejecutivo dominicano.

“Las autoridades haitianas tienen que ponerse a gobernar para su pueblo, creando oportunidades de inversión y de empleos para sus ciudadanos, garantizando el derecho a la educación y a la salud, dotando de documentos a sus nacionales y cumpliendo el compromiso de celebrar elecciones legislativas y municipals”, expresó el gobierno Dominican en una nota titulada “Haitianos sin papeles en República Dominicana. La verdadera historia”.

Recordó que cuando Danilo Medina asumió la presidencia, sólo 2 de cada 10 haitianos residentes en República Dominicana estaba en condición migratoria regular. El resto no tenia papeles dominicanos que explicaran o justificaran su estadía o presencia en este país.

“A ese problema se le agregó el de la nacionalidad dominicana de personas nacidas en República Dominicana hijos de padres extranjeros en situación migratoria irregular, afectados por la Sentencia 168-13 del Tribunal Constitucional”, añade la nota.

Explica que “en lugar de ignorar esos dos problemas, el gobierno de Danilo Medina tomó la decisión de resolverlos con valentía, apego a la ley y con humanidad. El pueblo lo reclamaba, la economía lo exigía y la ley lo mandaba”.

“Sin embargo, hay un tercer tema a tener en cuenta: el permanente flujo migratorio haitiano hacia el país. Cada año, cada mes, cada día, más haitianos ingresan y se quedan en República Dominicana irregularmente, sin ningún control documental ni de ningún tipo”, subraya.

En ese sentido, recordó que “el Ministerio de Defensa, a través del Cesfront y la Dirección General de Migración, devuelven todos los días a cientos de haitianos que ingresan a nuestro país irregularmente. O les impiden entrar irregularmente”.

“La verdad es que hoy el pueblo dominicano y su gobierno están unidos como nunca, firmes en la determinación de culminar el proceso de regularización de los extranjeros en su territorio, en devolver o impedir la entrada a todo aquel que pretenda ingresar irregularmente, así como en ratificar la nacionalidad dominicana de todos aquellos que manda la ley 169-14 y de ofrecer la posibilidad de la naturalización”, agrega.

Para el gobierno dominicano, la “ausencia de políticas públicas” en Haití, que expulsa a los hacia República Dominicana “es la causa real del flujo migratorio del país vecino, y toca al gobierno haitiano resolver ese problema, no al gobierno dominicano. Hasta ahí no podemos llegar”.

“El gobierno haitiano tiene que poner de su parte, hacer su tarea, la comunidad internacional debe entender y aceptar que en República Dominicana hay un gobierno que quiere ordenar con humanidad una situación que ha llegado a su límite y el pueblo dominicano tiene que respaldar con todas sus fuerzas la decisión de su gobierno”, puntualizó.